Las primeras horas de Dembélé como jugador del FC Barcelona han sido frenéticas: ha borrado los tuits en los que mostraba su admiración por Cristiano Ronaldo, y, en general, todos los tuits que hablaban sobre el Real Madrid, salvo los que hablan de su compatriota Benzema o de Zidane; además ha publicado un tuit al dictado de su nuevo club y ha sabido que Didier Deschamps lo ha dejado fuera de la convocatoria de la selección francesa para dos partidos de la fase de clasificación para el Mundial.
El seleccionador francés ha aclarado el motivo: Dembélé decidió ausentarse de los entrenamientos de su club durante dos semanas, por lo que se encuentra fuera de forma y no sería de ayuda a su selección. Francia, segunda en su grupo, se enfrenta a Holanda, tercera a tres puntos de los franceses. Una victoria de Holanda complicaría la clasificación de Francia para el próximo Mundial de Rusia... Y en ese caso muchos ojos se volverían hacia un Ousmane Dembélé que ha demostrado un nulo compromiso con su selección y con el club que apostó por él hace solo un año, dándole la oportunidad de competir al más alto nivel.
Que Dembélé llegue al Barça fuera de forma tampoco ayuda mucho a un Ernesto Valverde que necesita soluciones ya. El jugador francés tendrá que hacer su particular pretemporada, lo que retrasará su plena integración en su nuevo equipo.
Sobre el precio pagado por el joven extremo francés, el FC Barcelona es la comidilla europea: ha pagado por Dembélé más del doble de su precio de mercado, y eso tampoco le garantiza acercarse al nivel mostrado con Neymar... Lo que significa que tendrán que rascarse el bolsillo al menos una vez más. Muchos clubs se frotan las manos esperando a que Bartomeu llame a su puerta con dinero fresco y su nula capacidad de negociación.
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